Compartimos con vosotros un magnífico artículo aparecido en «La Verdad de Caspe». Unas líneas muy claras y directas que exponen sin rodeos una situación que hemos venido sufriendo la mayoría de los caspolinos y que es muestra clara del clientelismo del PSOE caspolino que ha discriminado a unos ciudadanos y ha premiado a otros afines.
http://laverdaddecaspe.com/2013/12/30/punto-y-final-a-la-mafia-del-ibi/
El IBI (antiguamente se conocía como la Contribución) lo tiene que pagar todo ciudadano, por eso afecta, prácticamente, a toda la población, te contamos todo sobre este impuesto, por su importancia respecto a nuestro bolsillos.
El Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) consiste en un impuesto que deben pagar los propietarios de inmuebles (casas, pisos, terrenos etc.) a los ayuntamientos de la población en la que están los inmuebles.
Es un tributo directo, real, objetivo y periódico que grava la propiedad, la titularidad de derechos reales de usufructo o de superficie o de una concesión administrativa sobre los bienes situados en cada término municipal.
El IBI incide sobre todos los bienes inmuebles pero hay diferencias según su naturaleza rústica (los que están en el campo) o urbana.
Afecta a todos los inmuebles de naturaleza urbana, unidades urbanas, con una relación de propiedad delimitada a efectos fiscales. Está regulado en la Ley de Haciendas Locales.
El recibo. Es la unidad básica de información. Veamos sus elementos.
Valor catastral:
De forma simplificada, es el valor del suelo más el valor de construcción de la vivienda. Normalmente, se acerca a la mitad del valor de mercado de la vivienda.
Base Imponible:
Constituida por el valor catastral de los bienes inmuebles no exentos.
Base Liquidable:
Es diferente del valor catastral sólo en los municipios que han efectuado una revisión catastral a partir de 1997. Se determina aplicando un coeficiente (varía según el año de la última revisión) que reduce el valor catastral.
Tipo impositivo:
Coeficiente expresado en porcentaje que ha de aplicarse a la base imponible para obtener la cuota final a pagar. Lo fija el Ayuntamiento, respetando unos mínimos y máximos que le vienen fijados en la Ley. Van desde el 0,40% hasta el 1,10%.
El IBI se paga basándose en el valor catastral del inmueble, que es un valor determinado por el Ayuntamiento correspondiente.
En Caspe el Ayuntamiento regido durante treinta años por el PSOE, tenía la obligación de controlar que todos los solares y las construcciones formasen parte del Catastro de Urbana, donde se determina el valor catastral para pasar a contribuir en el pago del IBI.
La desidia administrativa dirigida por una comisaria del PSOE con poder en la administración municipal y el clientelismo tan venerado por sus dirigentes, alcaldesa y concejales, que tantos votos a dado a los socialistas, propició en Caspe una política en la que bastantes solares y muchísimas edificaciones construidas en los últimos catorce años, no fueran dados de alta en el Catastro.
Esta falta de rigor y de equidad, ha provocado que durante los últimos catorce años se haya producido una situación arbitraria, puesto que la mayoría de los vecinos de Caspe hemos pagado el IBI, año tras año, sin tener conocimiento de que otros vecinos eran “agraciados” por el PSOE al no formar parte sus propiedades del Catastro y, por tanto, quedar “liberados” de pagar el IBI. Por eso, todos los demás, hemos sufridos subidas del IBI que perjudicaban a nuestra economía doméstica.
Ahora, el nuevo gobierno formado por CPC, PP y PAR, sensibles a superar esta gran injusticia, iniciaron desde el comienzo de su andadura el 26 de febrero de 2013 una política de respecto a la Ley, a la igualdad de todos los caspolinos, y a contener o bajar los impuestos municipales.
Como consecuencia de ese gesto político ordenaron examinar los padrones del Catastro de urbana y se han descubierto más dedoscientas propiedades que no estaban incluidas y que, por lo tanto, no pagaban el IBI, como sí lo hacíamos la gran mayoría de los caspolinos.
Estos caspolinos beneficiados por la gracia del PSOE ahora tienen que pagar el IBI al igual que todos pagamos, pero se libran de pagar el IBI de todos los años anteriores en porque los impuestos prescriben a los cuatro años; por ello el Ayuntamiento sólo podrá reclamarles, en su caso, cuatro años atrás. Los impuestos correspondientes de todos los años anteriores los hemos perdido para siempre todos los caspolinos.
Este motivo y la gestión económica del gobierno en la utilización de los recursos (eliminación de préstamos con entidades bancarias, gestión de compras a mejor precio por pronto pago de las facturas y gestión de obras sin subidas después de la licitación) ha dado como resultado que por primera vez en la historia democrática del ayuntamiento de Caspe, el IBI para el 2014 pueda bajar considerablemente, al pasar del tipo impositivo de 1,01% al 0,84%, lo que supone un desahogo para nuestras economías familiares.
Como colofón para recriminar la política del PSOE, sólo cabe decir que la ex delegada de Hacienda Pilar Mustieles, que gobernó durante 20 meses, se permitió decir en el Pleno del 18 de diciembre pasado, que se estaban cobrando cuatro años atrás a quienes no pagaban el IBI, lo que demuestra con claridad no sólo su falta de responsabilidad política sino también su incompetencia como concejal, porque debería de saber que ese cobro de impuestos viene determinado por Ley y que el hecho de no hacerlo supondría una conducta prevaricadora, injusta y parcial frente a todos aquellos vecinos que todos los años hemos pagado el IBI que nos correspondía. Lo suyo sería dimitir, pero no lo hará porque el PSOE caspolino se cree en la posesión de la verdad y ante barbaridades como la descrita, nadie de su partido le llama la atención.